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LABERINTOS URBANOS.
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Esta serie de siete esculturas realizadas en acero y oxidadas de forma forzada con ácido nítrico y patinadas con ceras, son el fruto de una reflexión sobre la CIUDAD.
Pretendo mostrar mi preocupación por las ciudades que habitamos y las transformaciones que se ejercen desde el urbanismo y que son practicadas por los agentes económicos, políticos, financieros, sociales y otros entes, tanto públicos como privados. Creo que la praxis económica especulativa muy instalada ya como un mal endémico en las sociedades occidentales desarrolladas, genera “sucias” connivencias entre los poderes gobernantes y los lobbyes del poder económico y financiero. Estas complicidades impiden que se promuevan políticas honestas que reglen con equidad las desigualdades sociales y el desarrollo racional de las ciudades.
Sería deseable que las “intervenciones” urbanas persiguieran la creación de espacios más acogedores, vitales y sensibles con la calidad de vida de los ciudadanos. También sería un logro que la globalización a ultranza que caracteriza el progreso de esta civilización, no generara la despersonalización ni la anulación de los ciudadanos como tales, disminuyeran las desigualdades sociales, no comprometieran el futuro de las generaciones venideras, ni sus efectos agredieran al medio ambiente. Lo deseable pues y quizás utópico, sería aunar esfuerzos e iniciativas para “hacer ciudad”, implicando y exigiendo a todos los actores involucrados y responsables que dejaran aparte cualquier interés ajeno al general.
Estos males sociales nos llevan, a un ritmo vertiginoso a la “no-ciudad”. Es decir, a una ciudad moderna pero excluyente, creada alrededor de una concentración de sectores financieros, administrativos y comerciales, así como institucionales y políticos y de zonas residenciales de status acomodado. En la periferia, se concentran los “infra-barrios”, zonas próximas a la degradación e incluso a la exclusión social. Se produce una “guetización” de colectivos marginados, muchas veces hacinados en conjuntos de viviendas sociales, de carácter suburbial, condenados a ver la ciudad a distancia, a no poder ejercer la ciudadanía de pleno derecho. A ser para siempre ciudadanos de segunda.
efrén
Creador plástico autodidacta. Donostiarra de origen, aunque afincado desde hace años en Bilbao. Licenciado en Ciencias de la Comunicación, forma parte de esa generación de escultores vascos que han crecido guiados por la inspiración de los grandes autores de la escultura vasca reciente.
Marcadas sus obras iniciales por este legado, pronto se esfuerza decididamente por hallar “espacios” nuevos, tanto donde ubicar su estilo propio y personal, como donde enmarcar su particular interpretación del concepto espacial. Así, se mueve a gusto en la abstracción geométrica, fría y racionalista, con una clara deriva hacia lo arquitectónico y el diseño.
La madera fue el material que utilizó en sus inicios, tanto en talla directa como en ensamblaje, método éste, que le permitió “construir” otro discurso creativo diferente. Así nacieron series como “SUSTRAIAK”, “FRONTOI”, “DISCOLOS”, “FORMAS”, “TORSIONES”, “TRAZOS” u otras series más circunstanciales.
Después, se produjo un paréntesis. Abandonó la madera como material expresivo y se decidió a utilizar el hierro, un material que le acercaba a otros formatos y a la posibilidad de crear en pos de la obra monumental.
De unos años para acá surgieron series como “BABELIA”, “AMETSAK”, “LAS CATEDRALES DEL HOMBRE” y “MINIMAL” y la serie que presenta en esta exposición del COAVN de Bilbao, “LABERINTOS URBANOS”, una serie que tiene como origen una reflexión sobre las ciudades que habitamos y su problemática.
Su última serie “KUTXAK” está aún en proceso de realización.
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La inauguración de la exposición se celebrará el día 11 de julio, jueves, a las 19:30h en la Delegación en Bizkaia del COAVN (planta baja). La exposición podrá visitarse desde el 11 de julio y hasta el 30 de agosto, de lunes a viernes en horario de 9:00 a 14:00h.
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